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martes, 24 de agosto de 2021

Novedades 2021 y panorama editorial de Nido de Vacas

 

Entrevistado por RadioRojas y por Agencia Servicios Informativos (ASI), el escritor y editor de Nido de Vacas detalló las novedades del sello y trazó un diagnóstico del sector. También en Clyfer TV destacó el presente de los autores rojenses que se suman al proyecto.

 

Foto: Fede Raposo (ASI)


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(Entrevista publicada en El Nuevo Diario Rojense, domingo 22 de agosto de 2021)


FEDERICO RIVEIRO


“No se está vendiendo más que antes, 
pero sí se escribe más de lo que se lee”

 

El escritor y editor rojense analizó la situación del mercado literario en la actualidad desde la perspectiva de Nido de Vacas que, no obstante la situación general, sigue adelante con su producción, incrementando su catálogo y ofreciendo permanentemente novedades para el lector.


El escritor y editor rojense Federico Riveiro analizó la situación del mercado literario en la actualidad desde la perspectiva de Nido de Vacas que, no obstante la situación general, sigue adelante con su producción, incrementando su catálogo y ofreciendo permanentemente novedades al público lector.

Riveiro admitió que el panorama es complejo: “No se está vendiendo más que antes, pero si es cierto que se escribe más de lo que se lee, entonces llega un momento en que no se llega a consumir todo lo que se produce, y ese puede llegar a ser un problema, el cual me gustaría conocer más en profundidad. En este año y medio no he podido salir a encontrarme de frente con la realidad y con el resto de los editores, más allá que estamos en contacto con los compañeros de Junín y Pergamino, pero lo cierto es que ellos vienen con otra dinámica de trabajo, pero aun así me parece que se está produciendo mucho más de lo que se está leyendo. En este sentido me parece que la pandemia ha hecho que mucha gente se haya puesto a escribir, a presentar proyectos y llega un punto donde piensan que van a hacer con todo eso, y en cierto punto tiene que ver con todo lo que vamos a presentar ahora”.

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Escuchar la nota completa en Radio Rojas

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Respecto de las novedades que Nido de Vacas ha lanzado al mercado en lo que va del año, explicó que “empezamos con Sakuntala, el libro de Alejandro Elcoro, la traducción de un hermoso poema, mientras que hace quince días apareció el primer libro de poesías de Marcelo Baleriani, quien me comentó que se quedó sin ejemplares, lo cual es algo muy importante, por eso hablamos con la imprenta para que se reimprima, se trata de Razón Maldita y es otro autor de Rojas que confía en nuestro trabajo. En estos momentos está llegando el libro de Coca Jué, Cuentos, que no son Cuentos.., que durante la pandemia se puso a escribir historias de su familia y fue un desafío nuevo para nosotros porque nos animamos a realizar un libro ilustrado, en este caso por su sobrina Micaela Romera Jué”.

A este respecto, Riveiro observó que “hay un gran auge de libros infanto-juveniles y veo producciones que son muy buenas porque tienen un nivel de ilustración muy grande, y es una historia dedicada a gente que conoce del tema, además hay una feria destinada exclusivamente a ese tipo de literatura. Sin dudas que hay zagas y autores, incluso en Argentina, que tienen un nivel de autores geniales, y quizás en algún momento se pueda incorporar a nuestro catálogo”.

Y prosiguió con las novedades de Nido: “El otro libro que también está circulando es De la Tierra, de Juan José Oppizzi, segunda novela del autor que publica Nido de Vacas; él tiene veinte libros publicados y tiene varios más en cajón. Hay una gran relación con Oppizzi;, en el caso de este libro, lo terminó el año pasado en plena pandemia, y lo reservamos porque había ganado un concurso que había organizado Milena Pergamino, entonces no quisimos que se chocaran las publicaciones”.

Respecto del trabajo del prolífico escritor radicado en Arrecifes, explicó que “esta es una novela histórica que cruza la figura de San Martín con los pueblos originarios, rastrea su origen y va armando una trama muy interesante, con cartas que aparecen del general donde pone de manifiesto que tiene sangre indiana, y después hay una segunda parte donde habla de la conquista del desierto, con ese cruce que hubo entre caciques de aquellos pueblos cuando San Martín esté reclutando tropas y preparándose para el cruce de Los Andes, por lo cual confluyen dos etapas diferentes y un núcleo de cierre que los encuentra”, y remarcó que “lo importante de esta recreación es seguir encontrando en San Martín esa faceta que siempre se intentó ocultar, la de político y revolucionario; es un lindo libro, que nos gustó mucho a los dos, es una novela corta, amena, un sello propio de Oppizzi”.

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Ver entrevista en ASI

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Por otro lado, prosiguió, “otra de las novedades es la llegada a imprenta del tercer libro de FilosoQué?, Filosofía Profana, siendo Ezequiel (Evangelista) y Lula (Padilla) los grandes precursores de esta aventura, que en este caso cuenta con la autoría Silvana Vignale, que es de Mendoza y doctora en filosofía, y llegó a nosotros a través de Diego Singer (reconocido filósofo argentino, ya publicado por Nido de Vacas)”.

“El sexto libro que estamos preparando es Pueblos y parajes de Rojas, de Hugo Silveira, que habla de los pueblos y parajes de Rojas, es un lindo trabajo de Hugo, era cuestión de recopilar todo su gran laburo, y se le hizo la edición completa de revisión de textos, se le incorporaron fotografías, por lo cual está listo para que salga la tirada completa. Hugo tenía un armado hecho por relevancia de localidades de acuerdo a los registros que venía incorporando, sabiendo por ejemplo de Rafael Obligado tiene algunos trabajos previos sobre la historia, de Carabelas tiene dos libros de Omar Polo, hay un libro de Los Indios que hizo Fernando Díaz. Lo que trató Hugo es no chocar con eso y enfocarlo desde otro lugar, entre la historia y la actualidad, fue así que hizo un relevamiento completo y hemos descubierto parajes que ya no existen más o que ahora están incorporados al casco urbano, un total de 50 parajes. Tratamos de utilizar un criterio para todos en cuanto a la distribución, en este caso en orden alfabético, como para que no quede lo más importante adelante y el resto atrás, o viceversa. Incorporamos fotos viejas y fotos nuevas de lo que ha quedado, porque hay lugares en los cuales quedó un edificio derrumbado y nada más, y hay otros que ni siquiera hay referencia, por eso lo que hizo fue ir casa por casa recopilando datos”, completó Riveiro.

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Ver entrevista en Clyfer TV

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Pero, pese a las dificultades pandémicas y, claro, económicas, Riveiro destacó que “es real que Nido de Vacas viene creciendo bastante, y sucede que se vienen acercando permanentemente autores que nos conocen porque tuvieron un libro en la mano, porque les interesó lo que vieron, quizás también a través de las redes, así que nos escriben muchos con intenciones de publicar y eso nos halaga mucho. Más allá de estas buenas noticias nosotros sabemos que debemos ser cautos a la hora de publicar porque somos un equipo reducido y no podríamos cumplir con todo”, y añadió que “por ese lado digamos que estamos muy contentos, aunque por el lado empresarial la cuestión es diferente, porque sigue siendo complicado y no se sostiene fácilmente, de todos modos, sirve para ir llegando a nuevos lugares y crecer desde lo estructural y lo visible, y si soportamos esperamos en algún momento tener un beneficio”.



Respecto de su desarrollo en el mundillo literario, Riveiro explicó que “antes que ser editor era autor y ahí entendí que nunca fui tratado como nosotros pretendemos tratar a los autores, porque entendemos que es importante tanto el autor como la obra, entonces buscamos que el autor quede contento, no como creador de tal o cual obra, sino también que sea respetado como persona. A veces pasa que puede ser un problema el hecho de corregir textos y gente que piensa que corregir distintos pasajes de su obra es juzgarlo de mala manera, y no es así, porque toda obra siempre necesita una revisión, y por ahora nos hemos encontrados con personas que lo aceptan perfectamente, sabiendo que tratamos de ser lo más coherentes y serios en eso, siempre teniendo como referencia que el autor tiene la última palabra”.

Respecto de cómo avizora el mercado literario a futuro, Riveiro dijo que “me cuesta cada vez más mirar a un futuro lejano, voy poniendo pie firme en lo realmente posible, aunque talvez no sea bueno perder perspectiva a largo plazo, y me parece que el mercado editorial ha tenido sus vaivenes, es por eso que a nosotros nos obligó a cambiar algunas estrategias. Ahora tendremos que esperar si esta nueva normalidad llegó para quedarse o podremos recuperar los espacios como los teníamos antes, desde que lugar se podrá fomentar el interés por la lectura, ver que importancia se le da a la editorial desde otros ámbitos”.

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jueves, 24 de junio de 2021

Elcoro: “Quiero dejar testimonio de algo que cambió mi visión de la literatura”


 El director de Cultura de la comuna de Rojas acaba de publicar, a través de la editorial Nido de Vacas, su traducción de Sakuntala, obra compuesta por el poeta y dramaturgo hindú Kalidasa circa los siglos IV y V.

 

Reportaje publicado en la edición del 20 de junio de 2021 en El Nuevo Diario Rojense

 


El actual director de Cultura de la comuna, Alejandro Elcoro, retomó su faceta de reconocido escritor y traductor, ya que acaba de publicar, a través de la editorial rojense Nido deVacas, su traducción de la versión en inglés de la magnífica Sakuntala o El anillo del destino (escrita obviamente en sánscrito en el original), obra considerada una de las piedras preciosas del teatro hindú. Su autor, conocido como Kalidasa, vivió en India entre los siglo IV y V d.C., y ha pasado a la posteridad como un brillante poeta y dramaturgo, siendo autor de poemas y epopeyas que supieron cautivar a grandes autores de la literatura occidental.

“El trabajo estaba guardado desde el año ‘94 y lo que hice fue rescatarlo. Esto es como un regalo, para dejar un testimonio de algo que me impacto y me cambió la visión de literatura cuando era joven. El libro lo leí por primera vez cuando tenía 23 años, y lo traduje para hacer un ejercicio de computación ya que me habían regalado mi primera computadora, y quedó ahí”, explicó Elcoro en ElNuevo en Radio.

Pero comenzó a evaluar su publicación cuando “empecé a conocer a Federico (Riveiro) y me pareció un chico tan serio y responsable como editor”. Explica que con el responsable de Nido de Vacas “estuvimos hablando de distintas posibilidades, ya que tengo cinco o seis libros inéditos, pero pensé en algo corto, interesante, que le pudiera gustar a la gente, y algo para dejar en el sentido de que no es un libro mío, sino un libro que traduje, y que es un clásico que no se conoce”, respecto de la elección de dicha traducción del “Sakuntala”.

No obstante, el trabajo no fue sencillo: “La traducción tenía muchísimos errores porque el libro fue escrito en sánscrito, que por supuesto no conozco, pero leí una versión en francés y otra en inglés, y trabajé sobre la que es en inglés pero, evidentemente, la ortografía, la puntuación en inglés, son propias, y trasladarlas al castellano a veces genera como un extrañamiento al lector. Pero con Federico y Liliana Barzaghi, con quienes lo fuimos releyendo, cada uno hacía sus observaciones, las comparaba con las del otro y llegábamos a un criterio común, lo cual no fue fácil”, nos comenta.

Por ejemplo, grafica, “hay períodos en inglés que se pueden leer normalmente, pero en castellano son raros; entonces tuvimos que argentinizarlos para que se hagan más comprensibles, para que la lectura sea más natural y que no ofrezca dificultades, porque bastante ya hay con todos los nombres, que son todos de la India, y eso genera un distanciamiento con el lector hasta que uno se acostumbra a entrar en la historia”.

Pero, ¿de qué trata “Sakuntala”? Elcoro lo explica con una precisión que revela su relación íntima con la obra en cuestión: “Sakuntala es el nombre de un ser femenino mitad mujer, mitad diosa, porque es hija de una divinidad de las aguas que hay en la mitología de la India, vive en un territorio sagrado, solamente dedicada a las cosas místicas y de la naturaleza, porque ella se dedicaba a regar plantas y a alimentar animales que había perdido su madre, son seres completamente puros. La etimología de Sakuntala es algo así como “el nombre de los pájaros” y, por otro lado, está el rey, que está persiguiendo un venado con sus guerreros, el venado entra en el bosque sagrado, las plantas se le ponen enfrente al rey y le dicen que no puede entrar armado y que tiene que dejar sus armas afuera.

El rey entra pero en vez del venado se encuentra con esta chica: hay un encantamiento recíproco y el rey se queda.  Lo reclaman sus asuntos en la corte, sus esposas, pero no vuelve. Ella también está embelesada. Finalmente hay una especie de unión que es admitida en la cultura india, que es por la base del amor de los dos miembros de la pareja, que después cuenta con la aceptación de los padres si es consentido. Pero en ese momento en que están arrobados, entra un monje muy poderoso, muy cascarrabias, que esperaba que lo recibieran con todos los honores de su investidura, pero no lo tienen en cuenta, y entonces le echa una maldición a Sakuntala: el rey le deja un anillo, le escribe su nombre y le dice que cuenta una letra por cada mes del embarazo y que cuando se cumpla, que vaya a la cortey se va a casar con ella. La maldición del monje dice que, si pierde ese objeto, el rey no la va a reconocer.

Cuando llega el tiempo ella va a la corte, ignorante de todas las cosas que pasan en un lugar de poder político, que es todo lo contrario a un bosque sagrado, y cuando cruza el río Ganges, pierde el anillo. No se da cuenta, y cuando llega a la corte, el rey no sabe quién es y piensa que el embarazo es de otra persona y que no puede tomar por esposa a una mujer que pertenece a otro hombre. No lo puede explicar porque el anillo de reconocimiento no está. Se van los monjes, ella desaparece en el aire, vuelva a la naturaleza de su madre y, poco tiempo después, traen preso a un humilde pescador que había querido vender el anillo del rey. Piensan que es un ladrón pero cuenta que pescó un pescado en el Ganges y en el vientre del pescado vio ese anillo. El rey, cuando ve ese anillo, se da cuenta de todo, y se le hace patente todo el rechazo esa mujer que él amaba. Se resuelve no en el terreno de los hombres sino en el terreno de los dioses. Es una muy linda historia”.

En cuanto a su estructura narrativa, explica que “es una obra de teatro, son siete actos, bastante parecido al actual o al de Shakespeare, si se quiere. Es un poco complejo porque no es una sola escena, como en el teatro griego, pero tiene un grado de sofisticación bastante notable para ser del siglo IV y por eso se ha convertido en un clásico de la India, y como acá no se conoce, trato de colaborar para que a alguien le llegue”.

Mientras tanto, no abandona, pese a su actividad en la función pública, su faceta de escritor: “Dejé dos trabajos casi completos, tengo dos obras muy buenas, para mi gusto, y una en particular que se llama “Las islas del olvido”. Son todas aguafuertes, al modo de Roberto Arlt, de mi vida, de lo que supe de mis padres, de mi infancia, de lo que era Buenos Aires en los años ‘60 y ‘70, de lo que era San Pedro, donde nací, de mis abuelos, mis tíos, mis bisabuelos, mis orígenes vascos y alemanes, un chico y una chica se conocen en un campo en La Pampa, se enamoran y se casan, llevo unas 110 y me faltan unas 20 ó 30 pero eso lleva tiempo y no lo estoy haciendo ahora”.


🔊 Escuchá la entrevista completa


-¿Cuándo nace tu amor por la literatura?

-De muy chiquito, quizás cuando aprendí a dibujar, tendría 4 ó 5 años. Nos pedían en la escuela y yo hacía unos trabajos larguísimos, historias ilustradas con personajes ya existentes, de los comics, de dibujos animados, de esos libros de Editorial Juventud, el Principe Valiente, Robin Hood, imitaba eso y, según mis viejos, hablaba en un idioma desconocido, generaba personajes con un idioma inexistente, es muy raro y no lo recuerdo (risas)… Leía según lo que me iba cayendo pero tenía cierta percepción que uno va seleccionando: a los 14 años leí “El extranjero”, a los 15 fui a ver “La guerra y la paz” en el cine y cuando volví a Buenos Aires me compré el libro, me hacía la rata del colegio y me iba a leer a un bar. Tenía claro que para mí era más importante leer que cualquier otra cosa.

-¿Sentís mayor inclinación por la literatura clásica o te gusta descubrir nuevos autores?

-No es que haya leído todos los clásicos, pero los más importantes los he leído, releído y releído. Pero también en estos meses de pandemia he leído muchísimos libros de autores desconocidos, ya que hay más tiempo, así que leo otras cosas, muchos autores nuevos, y encontré cosas muy buenas.

-¿Qué autores te referencian como escritor?

-No hay uno solo, pero son pocos: Tolstoi es uno, García Márquez es otro, Cervantes sería otro, obras que son mágicas en algún modo porque parece que generan un aparato de imaginación, porque leés “El Quijote” y no sabés qué es real y qué es ficción, y en “Cien años de soledad” pasa lo mismo. Hay un pequeño libro de Leo Teruz, que se llama “De noche bajo el puente de piedra”, que son trece relatos independientes pero vinculados entre sí, de modo que generan finalmente una novela y no podés creer que estar viendo ese personaje tiene que ver con otro que aparece después, es como un rompecabezas que adquiere sentido. Son esos libros mágicos los que más me han conmovido, y por supuesto los clásicos como “La Ilíada” y “La odisea”.

-¿Cómo se puede acercar a la gente al mundo de los libros?

-Es un fenómeno que no domino, pero hacemos lo posible, con divulgación, acercando autores, presentando gente. Es difícil, pero de algún modo, con el esfuerzo de otras personas desconocidas  que estarán haciendo lo mismo en las escuelas, en la televisión, algún autor se abre camino, aunque con más o menos suerte, esto es difícil saberlo. A veces son fenómenos comerciales, que funcionan pero que no son los mejores resultados literarios, pero creo que muchísimo va por el boca a boca: si te gusta un libro posiblemente se lo recomendás a otras personas.

-¿Qué opinás que Rojas tenga una editorial propia, como Nido de Vacas, que ya posee un interesante catálogo?

-Las veces que había publicado antes lo había hecho en Buenos Aires y esta vez decidí hacerlo acá porque lo fui conociendo a Federico. Y me parece tan responsable, tan profesional, minucioso, insistente: punto por punto, palabra por palabra, te va preguntando si una cosa está bien, si es coherente; no deja pasar una, y desde el punto de vista físico, si ves el libro, la impresión, el papel, las imágenes, todo es perfecto. Entonces merece el apoyo de nosotros y de muchísima gente que puede encontrar acá una editorial del nivel de cualquiera de Buenos Aires.

 

 📚 Más detalles del libro










martes, 10 de noviembre de 2020

Federico Riveiro: “La apuesta está en mostrarnos como una alternativa editorial”

 

Transcribimos la nota publicada en la edición del domingo 8 de noviembre de 2020 de El Nuevo Diario Rojense, basada en la entrevista realizada por Hernán Martino y Enzo Medina en Radio Rojas.


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FEDERICO RIVEIRO PASÓ POR “EL NUEVO EN RADIO”

“La apuesta está en mostrarnos como una alternativa editorial”


El editor responsable de la editorial rojense Nido de Vacas adelantó en la 92.5 la nueva publicación lanzada al mercado literario, lo cual constituye la décima obra del catálogo de Nido de Vacas, y la quinta producida en el curso del presente año: una hazaña, sin duda, para una editorial artesanal




Federico Riveiro, editor responsable de la editorial rojense Nido de Vacas adelantó en la 92.5 la nueva publicación lanzada al mercado literario, lo cual constituye la décima obra del catálogo de Nido de Vacas, y la quinta producida en el curso del presente año: una hazaña, sin duda, para una editorial artesanal.


“Como para cerrar el año, decidimos incluir un solo título más (“Mil veces la vida”, de María Elena Sofía), lo cual no es poco pero es uno de los cuatro que teníamos”, explicó Riveiro en El Nuevo en Radio”.


“Se trata de una autora de Chacabuco, con lo cual se nos abre la posibilidad de Nido de Vacas de llegar a otra ciudad. No es la primera obra de María Elena Sofía, que ya tiene algunos premios, y ha estado en Rojas, pero sí es su primera novela para adultos, también trabaja en el sector editorial y es la primera obra que realiza con otra editorial”, agregó.


-Mientras tanto, estuviste representando a Nido de Vacas en distintos eventos virtuales...
-Participamos en la primera Finde (Feria de la Cultura de la Provincia), fue en mayo, y estamos preparándonos para la segunda, para la cual se incorporaron otros rubros; se hace del 19 al 22 para editoriales y también tenemos una participación con el colectivo Ruta 188. Luego de la primera, los organizadores hicieron una encuesta para conocer las necesidades del sector y para la próxima edición (del 19 al 22 de noviembre) nos invitaron a participar de una charla, se hizo un cruce con el Colectivo Malisia, de La Plata, esa experiencia nos parece interesante porque visibiliza lo que está ocurriendo.


Respecto de la situación de las pequeñas editoriales y la posibilidad de obtener alguna respuesta de parte de los niveles de gobierno, dijo que “la apuesta está, pero es un trabajo a muy largo plazo”, y subrayó a ese respecto que “tenemos que hacer más hincapié en que se lean autores de Junín, Pergamino y de la zona, la apuesta está en empezar a mostrarnos como una alternativa, esa es una discusión que tenemos y que le pasa también a los autores”.


“Acá se presenta una alternativa, pero que cuesta sostener; en Junín tenemos participación en la Feria del Libro local contando qué es una editorial, que nosotros no le cobramos a los autores, que cuidamos el catálogo, que cada publicación tiene un trabajo de edición muy profundo; es que está esa confusión porque no todos somos lo mismo, no somos una editorial imprenta y desde ese lugar queremos proponerlo como una alternativa para dar de conocer a los autores de esta región y difundir lo nuestro, lo que se escribe más allá de la General Paz”, completa.


-¿Te has planteado abrir el catálogo de Nido a otros géneros?
-Han llegado otras propuestas; estamos abiertos a todo, pero no todo lo que llega es publicable y no todo nos interesa.


-¿Te cuesta, siendo vos mismo escritor, tener que decirle a otro autor que no estás interesado en su obra?
-Siii... Además nuestra propuesta justamente es valorar la propuesta del autor, al que no le cobramos; pero decir que no, es algo que no es grato. Se pinchan proyectos que tiran abajo el trabajo el autor: hacer un libro demanda mucho esfuerzo pero no todo texto terminado es publicable. Y mismo he mandando textos a editoriales y nunca tuve respuesta, así que ni siquiera sé si sirven o no, son experiencias complicadas para cualquiera que quiere publicar, entonces estar desde este lugar y tener que decir no, me pesa mucho.



Un desmayo en el vacío, la
novela más reciente de Federico Riveiro

Como quiera que sea, Nido de Vacas sigue firme en su trayectoria y es así que en el curso de este complicadísimo año la editorial rojense sumó cinco títulos: “Un desmayo en el vacío”, del propio Riveiro; “Canto de tierra y pan”, de Rolando Galante; “Camino” y “La llave maestra”, de Araceli Rodríguez (que ya están todos a la venta desde agosto), y ahora “Mil veces en la vida”, que estaría saliendo en algunos días más a la venta.


Con este objetivo, Riveiro adelantó que en los próximos días Nido estará publicando en su web ofertas y promociones. En ese sentido reconoce que los precios de los libros “son para salir corriendo, es un impedimento. Los libros tienen el problema de no ser objetos de primera necesidad, pero igualmente queremos ponerle el menor precio posible si bien producirlos sale caro y no podemos poner un libro a 300 pesos, como lo veníamos haciendo. Estamos manejando un precio de 500 a 550 pesos, en comparación con proyectos similares tenemos precios accesibles”.


-¿Cómo controlás las ventas de ejemplares, lo cual siempre ha sido un problema?
-Tengo todo controlado, cada libro es numerado y me permite controlar mejor, cuesta pero sé más o menos la circulación y cuando tengo las cuentas hechas, arreglamos con el autor. Tratamos de ser ordenados en sentido.


-¿Y el tema de los derechos del autor y los derechos editoriales?
-Una vez que está inscripto, el libro queda asentado en la Dirección Nacional de Derecho de Autor, firmamos contrato y siempre los derechos patrimoniales son del autor, nosotros contratamos cierta cantidad de ejemplares y por determinado tiempo para publicar su obra, que es del autor. En el caso de que un autor quiere publicar su libro en otro lado, hay que negociar derechos con la editorial que los tiene, y cuando se termine el contrato el autor queda liberado. Las editoriales grandes necesitan grandes volúmenes y básicamente quieren vender, por eso están estas editoriales chicas, donde las tiradas son cortas y si se vende todo, con suerte podemos reimprimir, podemos manejarnos de otra manera.


-¿Y cómo está el mercado editorial, en general?
-Creo que ha caído, y sí sé que cayó la producción: había editoriales con libros listos que recién están sacando ahora porque veían que el panorama no pintaba bien. En el tema ventas hubo discusión por las librería cerradas, ahí se potenció el mercado on line y para nosotros sigue siendo un problema porque un envío sale lo mismo que un libro, es extremadamente caro. Hubo proliferación de lecturas en formato electrónico, eso se ha potenciado.


-Y también los medios electrónicos permiten “piratear” obras a destajo...

-Hay muchísima y hubo una gran discusión sobre eso. En Mercado Libre he encontrado libros de Nido de Vacas que han sido bajados de Amazon, donde están publicados. He encontrado libros a 2000 pesos y digo qué pasa, pero lo hablé con el autor y no podemos hacer mucho. Hay autores de primera línea que saltaron cuando se creó una biblioteca virtual, adonde los autores podíamos subir nuestros libros en PDF. Yo estoy en los dos lugares, por un lado defendiendo los derechos del autor, porque cuando hicimos la campaña de PDF pusimos un límite porque son libros que se pudieran haber vendido y que el autor le restan la posibilidad de cobrar, por otro lado nos dio la posibilidad de hacernos conocer.


-¿Estás leyendo alguna nueva obra que podría ir a engrosar el catálogo de Nido?


-Tengo varias. Ningún autor es local, teníamos una novela de Amir (Abdala) pero el proyecto finalmente no prosperó. De a poco aparece gente de lugares muy inesperados que siguen nuestras actividades, preguntan y nos dicen que tienen algo para que leamos, pero el problema es que no nos da la capacidad para leer todo y debemos dosificar el tiempo. Otra cuestión es que lo hacemos gratis y la corrección de un texto demanda mucho trabajo.


-Finalmente, mi amigo, ahora lo convocamos en su carácter de autor: ¿Qué podemos esperar de su último trabajo, “Un desmayo en el vacío”?¿Sería una suerte de secuela de su anterior “Penales para el primer amor”?


-No lo llamaría continuación. El otro trabajo está narrado en primera persona por un personaje, y este retoma un hecho particular de la otra desde la tercera persona, se dispara para otro lado, y a ese primer personaje lo deja en un plano secundario y se centra en los otros tres. Es una historia donde son tres adolescentes y una mujer en medio de una familia un poco disfuncional, y uno de los protagonistas viene cargando una historia pesada desde sus orígenes y del que se va a ir enterando a medida que avanza la novela. Involucra un tema que no es nada nuevo pero sí se refiere a esa época oscura de los ‘70 en Rojas, toca un poco ese tema porque el origen incierto de uno de los personajes va por ahí, y eso queda abierto para saber cómo será el derrotero de los otros personajes.


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Reviví también la entrevista realizada con la Agencia Servicios Informativos (ASI), junto a Eduardo Alberti.

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Un desmayo en el vacío


Federico Riveiro

Nido de Vacas, 2020. Cicatrices/4. (Novela)
21 x 14,8. 198 páginas.
ISBN: 978-987-47084-5-8
Edición: Ezequiel Evangelista, Ludmila Padilla.  Fotografía de tapa: Nayré García Montero. Fotografía del autor: Tomás Basilici. Colaboración: Juan José Oppizzi. Diseño: Nido de Vacas. Diseño de colección: Emiliano Raggi.






lunes, 3 de agosto de 2020

Araceli Rodríguez: “Para mí escribir es terapéutico, pero siempre me gustó escribir”


Transcribimos la nota publicada en El Nuevo Diario Rojense, basada en la entrevista realizada por Hernán Martino y Enzo Medina en Radio Rojas.


ARACELI RODRÍGUEZ: ENTRE “CAMINO” Y SU PRIMERA NOVELA

“Para mí escribir es terapéutico, pero siempre me gustó escribir”


En 2012 publicó “Camino. Vivencias de un ACV”, testimonio y fruto de su recuperación - Y casi 16 años de aquel episodio que cambió su vida para siempre, presenta su primera novela, “La llave maestra”, que aparece en simultáneo a la reedición de “Camino”, obra que estaba agotada desde hace algunos años






Con proverbial modestia, asegura que no es escritora y que para ella escribir es terapéutico. Pero un 1 de agosto de 2004 la convecina rojense Araceli Rodríguez sufrió un ACV que le dejó graves secuelas físicas y una afasia significativa. Es cierto, sí, que la escritura de su experiencia formó parte de un proceso de rehabilitación paciente e ininterrumpido. Así fue que en 2012 publicó “Camino. Vivencias de un ACV”, testimonio y fruto de su recuperación. Al margen, lo cierto es que Araceli dio un paso más en su evolución personal y se lanzó a la escritura de una obra de ficción. A casi 16 años de aquel episodio que cambió su vida para siempre, presenta su primera novela, “La llave maestra”, que aparece en simultáneo a la reedición de “Camino”, obra que estaba agotada desde hace algunos años.

“La llave maestra” narra la historia de una mujer que huye sin dejar rastros y se oculta en un pueblo alejado de la provincia de Río Negro. Casi veinte años después, atormentada por los recuerdos y los secretos, regresa dispuesta a sanar las heridas de su pasado.

En tanto, “Camino”, que agotó una primera edición de 500 ejemplares, cuenta la experiencia de vida de la autora tras sufrir un accidente cerebro vascular. Se trata de un testimonio profundo, de fe y de superación, que invita a reflexionar sobre el valor de las pequeñas cosas y la oportunidad de volverá empezar.

Esta nueva versión acerca el texto original a un público más amplio. Se incorporan correcciones de estilo y una revisión de la terminología clínica, procurando una narrativa accesible tanto para quienes se interesen en la rehabilitación desde lo vincular como desde el área de la salud. Ambas producciones llegan de la mano de la editorial rojense Nido de Vacas que, entre paréntesis, tiene previsto poner en circulación cuatro nuevos libros en el transcurso de este mes, todos de autores rojenses. 

Los otros títulos son el poemario “Canto de tierra y de pan”, de Rolando Galante (recientemente declarado de interés municipal y cultural por el HCD de Rojas), y la novela “Un desmayo en el vacío”, de Federico Riveiro.

Esta semana, en “El Nuevo en Radio”, Araceli dijo que “lo mío es un trabajo terapéutico, por lo cual te agradezco el título de ‘escritora’, aunque la verdad es que siempre me gustó escribir; cuando comencé a hacerlo fue tan hermoso para mí que fue como dejar un poco de lado el pensamiento de que, por ejemplo, mi lado derecho no funcionaba. Por lo cual yo hacía mucha terapia, durante siete años, casi todos los días”.


“Empezar a escribir me llevó a otro terreno: y fue muy bueno. Cuando comencé mi tratamiento, a doce o quince días de operada, la fonoaudióloga me pidió que escribiera mi nombre... y yo no podía hacerlo. Me acordaba de la letra ‘a’, pero no pude escribir mi nombre...”, relata luego, describiendo las consecuencias de la afasia que le dejó como secuela su ACV. El lado derecho de su cuerpo estaba paralizado, su lado izquierdo apenas respondía; prácticamente sólo podía mover sus ojos, y las palabras se formaban en su mente para luego desaparecer, inasibles.

“La escritura me ayudó un montón; de no poder encontrar una palabra a poder escribir un libro contando mi historia, para mí fue algo grandioso”, señala. Pero advierte: “Yo soy creyente, y me puse a pensar que si Dios había permitido que esto me sucediera, era para algo bueno, si bien mi rehabilitación fue muy larga, muy dura y muy difícil. Pero me llevó a encontrar estas cosas tan hermosas, como poder escribir”.

Igualmente admite lo duro que fue perder su libertad de movimientos y, literalmente, depender de su familia o de profesionales para poder, sencillamente, subsistir. “No podía hacer nada, pero lentamente avanzaba; y el entorno familiar me ayudó muchísimo, como las amistades, ya que siempre suplían las necesidades que yo tenía”, recuerda.





“Camino” aparece en 2012. Pero, ¿cuáles eran sus expectativas en cuanto a dar a conocer públicamente una vivencia tan íntima y confesional? “Mirá –responde- yo lo escribí porque pensé que podía ayudar a otros. Primero, porque me gustaba escribir, y luego porque le podía dar una mano a otro que pasara lo mismo que yo. Me planteé tres metas y el libro se terminó cuando pude cumplir esas metas que me había propuesto”. Su primer opus fue básicamente una edición independiente, “que ni derechos de autor tenía”, comenta, con humor. Para su reedición, paralela a la aparición de, ahora sí, su primera obra de ficción, confió en el equipo de Nido de Vacas, gente linda que se toma muy en serio a los autores de su catálogo y lleva las cosas a un nivel profesional.

Sobre “La llave maestra”, su primera novela, Araceli explica que “siempre me gustaron las novelas, y me animé: empecé sola, estuve un año y pico escribiendo; luego la llamé a mi fonoaudióloga, a ella le gustó, empezamos a trabajar, a pulir mi libro. Después ya lo vio Federico Riveiro, y así fue”.

Pero, ¿cómo nace “La llave maestra”? Así de simple: “Comenzó a nacer porque hace muchos años me contaron una historia, y esa historia me dio el pie para empezar. Aclaro que la historia es totalmente una ficción. Es sobre una chica que vive en Rojas, que sufre una desilusión amorosa, que conlleva a un montón de circunstancias muy difíciles para ella, por lo que se va de Rojas a vivir a un pueblo de la provincia de Río Negro. Ahí empieza de nuevo, forma su familia y luego, una amiga, que siempre la estuvo buscando, la encuentra. Vuelve a Rojas, y ahí se encuentra con un montón de cosas de su pasado”.

“Yo entendí muchas cosas con mi ACV; me dejó muchas cosas positivas; también negativas, qué se yo, un brazo que no me responde, una renguera... Pero interiormente pude crecer y darme cuenta de un montón de cosas, valorar la vida como realmente siempre me gustó hacerlo, aunque a veces uno no encuentra la manera. Pero el accidente vino para reanimarme...”

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La llave maestra

Araceli Rodríguez

Nido de Vacas, 2020. Cicatrices/3. (Novela)
21 x 14,8. 124 páginas.
ISBN: 978-987-47084-3-4
Edición: Federico Riveiro, Ezequiel Evangelista, Ludmila Padilla.  Fotografías: Tomás Basilici. Colaboración: Laura Spina. Diseño: Nido de Vacas. Diseño de colección: Emiliano Raggi.




Camino. Vivencias de un ACV 


Araceli Rodríguez

Nido de Vacas, 2020. 
21 x 14,8. 106 páginas.
ISBN: 978-987-47084-2-7
Edición: Federico Riveiro, Ezequiel Evangelista, Ludmila Padilla.  Ilustraciones: Emanuel Evangelista. Fotografía del autor: Nicolás Basilici. Diseño: Nido de Vacas





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martes, 30 de junio de 2020

Rolando Galante: “Mi escritura tiene que ver con mi compromiso con la tierra que habito y con sus hombres y mujeres”




Transcribimos la nota publicada en la edición del domingo 28 de junio de 2020 de El Nuevo Diario Rojense, basada en la entrevista realizada por Hernán Martino y Enzo Medina en Radio Rojas.


Rolando Galante: “Mi escritura tiene que ver con mi compromiso con la tierra que habito y con sus hombres y mujeres”



La obra del docente y escritor rojense reúne poemas escritos entre los años 2018 y 2020 - Este libro, segundo volumen de la colección de poesía Espantapájaros, de la editorial rojense Nido de Vacas, saldrá a la venta en el transcurso del mes de julio.

Rolando Galante presenta su primer libro: Canto de tierra y de pan.

El docente y escritor rojense Rolando Galante se prepara para presentar en los próximos días su primera obra literaria: “Canto de tierra y de pan”, que reúne poemas escritos entre los años 2018 y 2020 y que toma forma de libro de la mano de la editorial Nido de Vacas. Esta obra, segundo volumen de la colección de poesía Espantapájaros, saldrá a la venta en el transcurso del mes de julio.
Desde la editorial, en la info difundida al respecto, señalaron que “Galante es profesor de Lengua y Literatura, con una trayectoria de más de veinte años en diferentes establecimientos educativos de nuestra ciudad. Su labor autoral se ha visto reflejada en numerosas letras de canciones, algunas de las cuales fueron musicalizadas por distintos compositores y han participado en festivales de canciones inéditas. En todos los casos obtuvieron premios. Dichas letras forman parte del cancionero inédito Soy la semilla, escrito entre los años 2006 y 2009. Actualmente forma parte de Ramito de Albahaca, un grupo que amalgama música, alfarería y literatura. También incursionó en la radiofonía como co-conductor del programa “Ecos del ayer”, que se emitió por Radio Rojas. El autor es, además, un actor comprometido con un proyecto de país equitativo, solidario, feminista, garantista, en el que la justicia social sea un tema de estado, como la salud y educación públicas, y el salario de los trabajadores. Milita por un país integrado a la Patria Grande latinoamericana, libre del yugo de las grandes potencias y los capitales especulativos que por tanto tiempo nos han sometido al atraso y la pobreza”.



LO QUE NOS DIJO EL AUTOR
En diálogo con “El Nuevo en Radio”, Galante nos dijo, respecto de la iniciativa de publicar su primera obra, que “la idea surge como nacen muchas cosas, a partir de encuentros fortuitos y conversaciones informales que veníamos teniendo con Fede Riveiro (responsable de Nido de Vacas), en las que le comentaba sobre un material que tenía pero quedaba postergado hasta que, a principios de este año, en una de las escuelas en las que trabajo coincidimos con Ezequiel Evangelista (también de la misma editorial), quien me dio el empujoncito para que les enviara el material”.
“Tengo entre 70 y 80 poemas escritos, a partir de ahí empezamos a reunirnos, y empezamos a trabajar en una selección hasta que quedaron los 32 que conforman el libro que vamos a publicar”, explica.
En la misma línea, indicó que “cuando empezamos a reunirnos, la idea que tenía era que el libro tuviera una unidad conceptual, que no fueran poemas que no tuvieran nada que ver uno con el otro”. 
Respecto de la temática de su obra, Galante dijo que “muchas veces nosotros creemos que elegimos los temas acerca de los cuales vamos a escribir pero es al revés, esos temas ya están en nosotros y se manifiestan”, y agrega: “Mi escritura tiene que ver con mi compromiso con la tierra que habito y con los hombres y las mujeres que viven en esta tierra; yo nací, crecí y vivo en Rojas, y me reconozco como un hijo de la vasta extensión del paisaje latinoramericano”.
Y reflexiona: “Si tuviera que definir la poesía en una frase, cosa que es imposible, diría que es el canto coral de y para los pueblos; concibo la poesía y la cultura como algo popular: nadie puede negarle al pueblo la participación en la cultura, todos pueden y deben participar de la cultura. Como decía un poeta riojano, Ariel Ferraro, que ha nutrido tanto nuestro cancionero popular, ‘los pueblos que poseen canto propio son los únicos capaces de sobreponerse al destino más adverso’. Canto de la tierra, pensando en nuestra Pachamama, y en los hombres y mujeres que todos los días luchan por conseguir el pan, que debe ser repartido y para compartir siempre. Mi libro tiene que ver con todo esto, que el libro tenga ‘latidoamericano’, haciendo un juego de palabras…”
Respecto del compendio de trabajos, explicó que “los poemas son de 2017 y 2018 en su gran mayoría, algunos los escribí en 2020 y no he hecho modificaciones en los contenidos, pero lo que sí ocurrió es que esta pandemia y el aislamiento hizo que se retrasara el trabajo que veníamos realizando. No modifiqué el contenido de los textos y será motivo para futuros poemas: esta pandemia nos debe hacer repensar el estilo de vida que veníamos teniendo, una sociedad actual que se sostiene a partir del consumo todo el tiempo, consumo de muchas cosas que a veces no son necesarias o que no hacen a nuestra calidad de vida”.
“Estaría bueno volver a vivir en armonía con la naturaleza, el hombre ha castigado tanto la tierra que de alguna manera nos pasa factura, las sociedades precolombinas han sido muy sabias en ese estilo de vivir y lamentablemente nos hemos alejado muchísimo de eso. Los incas se extendieron desde el sur de Colombia hasta Mendoza y en esa vasta geografía, con un sistema que ha despertado algunas controversias, de reparto donde a nadie la faltó comida y todos pudieron vivir en armonía con la naturaleza, y esta sociedad que construimos es tan endeble que un virus pone a tambalear a las potencias mundiales”, apunta.
Respecto de la estructura de sus trabajos, explica que “es poesía en versos libres, agrupados en estrofas. Cada uno, de acuerdo al contenido, tiene una estructura particular. Los chicos de Nido de Vacas hicieron aportes importantísimos y una sugerencia tenía que ver con pasar alguno de los poemas a prosa, probamos pero no estuve tan convencido y mantuve la idea original”.
-¿Te costó dar ese paso que es franquear la barrera que separa al autor del público que, en definitiva, juzgará su obra?
-Hubo una manifestación anterior que no tiene una explicación racional, es algo que sentí: tenía que publicar lo que había escrito, sobre todo en este último tiempo. Uno siempre escribe, guarda y es muy reacio a la hora de tener que mostrar lo que uno ha hecho pero sentí ese deseo, esta vez, de decir “tengo esto y quiero compartirlo”, ponerlo a consideración, que la gente lo lea, quiero dejar un testimonio sobre estas cuestiones que para mí son centrales, como lo es nuestra identidad cultural, saber de dónde venimos para saber quiénes somos. Las ambiciones son muy grandes y para achicarnos hay tiempo, y en ese sentido la obra pretende ser un punto de inicio acerca de hacer pensar y reflexionar a partir de la poesía nuestra compleja identidad cultural.
“Somos hijos de un genocidio y de la posterior negación de ese negocidio; durante 500 años se ha intentando imponernos una cultura, negando otra que no puede ser negada”. 
-El actual contexto crítico que atraviesan varios países de Sudamérica, ¿afectó de alguna manera tu proyecto?
-En relación con la escritura ni lo facilitó ni lo complicó porque es aquello de lo que me nutrí y quise dejar plasmado en el libro. Hay una serie de textos que tienen que ver con nuestra cultura originaria y otra serie que tiene que ver con nuestra América precolombina y actual, y claro que los acontecimientos políticos de nuestro continente aparecen reflejados en algunos textos. El contexto sí incidía, por mi manera de pensar, en el estado anímico en el que yo escribía los textos porque, por ejemplo, hay un texto que se titula “Wuliwya”, como se dice en lengua aymara, que habla de lo que pasó en Bolivia y cómo se derrocó a un gobierno democrático.

Sobre la presentación formal de su primer opus, no hay aún fecha establecida, en virtud de la contingencia. Mientras tanto, Galante explicó que “Federico (Riveiro) mandó el último borrador a la imprenta y calculamos que el fin de semana (por el presente) va a llegar un primer ejemplar, denominado prueba de galera, sobre el cual debemos trabajar y hacer alguna corrección o agregado puntual. Calculo que la semana que viene se va a estar mandando el borrador definitivo y de ahí van a venir los ejemplares y luego organizaremos la presentación, viendo de qué forma lo hacemos, ya que debemos tener en cuenta esta situación que estamos viviendo”.
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Escuchar la entrevista completa  📢

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Canto de tierra y de pan

Rolando Galante 

Nido de Vacas, 2020. Espantapájaros/1. (Poesía)
21 x 14,8. 88 páginas.
ISBN: 978-987-47084-4-1
Edición: Federico Riveiro, Ezequiel Evangelista, Ludmila Padilla.  Ilustraciones: Raúl Soria. Fotografía del autor: FD Fotografía. Colaboración: Carla Berruti. Diseño de colección: Emiliano Raggi.