miércoles, 12 de septiembre de 2018

Fragmentos y narraciones (10)



Juan Carlos Llauradó nació el 30 de noviembre de 1958, en Adrogué, Provincia de Buenos Aires.

Dirigió varios talleres de lectura y escritura. Como profesor de Filosofía y Ciencias de la Educación trabajó en escuelas de catorce provincias. En 1994 publicó Antojolía, un libro de narraciones y poesías, junto a otros autores de Adrgué. En 2009 ganó el Primer Premio del XXI Certamen Internacional de Poesía y Narrativa Breve organizado por la editorial Nuevo Ser. De allí nació la edición de su libro de poemas "Dones Simbólicos". También integró las antologías "Letras del mundo 2009" (Nuevo Ser), "Poetas y narradores contemporáneos" (De los cuatro vientos) y del Concurso Literario 2011, organizado por la Cooperativa de Luz y Fuerza Eléctrica de Rojas (Clyfer).
Falleció en enero de 2017 en Rojas (Buenos Aires), donde estuvo radicado durante casi veinte años.
El libro "Literales ausencias" (Nido de Vacas, 2018) y la serie de poemas leídos, musicalizados e ilustrados que lleva por título "Fragmentos y narraciones", constituyen homenajes a su vida y obra.
En este décimo capítulo de la serie las voces de Marcela Taparauskis y Luciano Pérez, y la lente de Nayré García interpretan el poema "Inexistencias".

Agradecemos especialmente la participación de Natasha Trotta Baldomir.





"Fragmentos y narraciones"



Capítulo X: “Inexistencias”


Voces: Marcela Taparauskis y Luciano Pérez

Obra plástica: Nayré García (Fotografía). Modelo: Natasha Trotta Baldomir

Presentación: Juan Carlos Castro

Edición de audio: José Luis Terzaghi

Grabación: Eduardo Alberti

Realización: Nido de Vacas Ediciones y FilosoQué


"Inexistencias". Nayré García (Fotografía). 42x30. Modelo: Natasha Trotta Baldomir


Inexistencias



Hiéreme cuanto puedas.
Devórate mi cuerpo.
Hazme agonizar eternamente.
Envenena mi alma
con toda tu cólera.
Apuñala mi espíritu
con hojas de antiguos aceros.

Quítame el aliento
que aún me queda.
Vacía mis venas.
Asola mi rostro.
Borra cada paso que he dado.
Destruye cada hito
de todas mis gestas.

Con tu hacha de símbolos
cercena mis manos.
Haz conmigo una fogata de sombras.
Insulta con tus labios de hiel
el acíbar de toda mi existencia.
Consume mi corazón
hasta transformarlo
en vestigios,
de tu infame esperanza.


Haz que todos se olviden de mí.
Proscribe del calendario
cada fecha que he vivido,
y en el campo de nuestras batallas
antes de hundir tu espada
en mi pecho,
mírame, tan sólo, por un instante, a los ojos
y dime porqué
me has odiado tanto
cuando yo te otorgué
el más sincero de todos mis sentimientos.





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